Copán Ruinas, Honduras

Salimos de Tegucigalpa y atravezamos casi todo Honduras para llegar a la pequeña ciudad de Copán Ruinas, una ciudad de calles de adoquines con edificaciones antiguas y un poco de turismo. Lo que mas nos llamo la atención apenas llegamos fueron los moto taxis.

Desde la ciudad se puede llegar caminando hasta la ciudad arqueológica de Copán, una antigua ciudad Maya que se dice era la ciudad en donde se estudiaban los hechos astronómicos. Lo que se destaca en el sitio son las estelas, esculturas talladas en piedra que representan a los gobernantes de Copán junto con su historia.

También algo característico y único, ya que no se encuentra otras ciudades Mayas, es la escalinata de los Jeroglificos, una escalera en la que cada escalón de piedra esta tallado con jeroglíficos que van relantando una historia, cada cierta cantidad de escalones hay una escultura que representa a uno de los reyes de Copán por lo que la historia que la escalera cuenta podría ser lo sucedido en cada reinado. En donde debería estar la principal escultura de la escalera actualmente hay un hueco, ya que los arqueólogos de Estados Unidos que ayudaron al gobierno de Honduras a desenterrar la escalera pidieron a cambio del trabajo llevarse la escultura que ahora esta en un museo.

También en el sitio hay templos-piramides, el juego de pelota, clásico en todas las ciudades Mayas, la necrópolis y otras edificaciones y esculturas.

Continuando el viaje pasamos unos días en Santa Rosa de Copán, un poco mas al oeste, también una pequeña ciudad con calles de adoquines y edificaciones antiguas.

Tegucigalpa, Honduras

Cuando entramos a Honduras en la frontera encontramos un montón de gente que nos hacia señas de hacia donde ir y nos ofrecía ayudarnos para hacer los tramites de inmigración y aduana, pero les dijimos que no. Estacionamos el auto y empezamos a preguntar buscando hacia donde dirigirnos, ya que no esta claro donde es cada oficina, son muchas casitas y puertas y nada esta señalizado. Entramos a una oficina que nos dijeron para sellar los pasaporte y había un señor en un escritorio, con la camisa desprendida que dejaba ver la musculosa de abajo y un ventilador, cuando entramos nisiquiera levanto la cabeza y seguía sellando papeles; nos pregunto si teníamos la vacuna para la fiebre amarilla y cuando le dijimos que no sin mirarnos nos dijo que nos regresemos a Nicaragua. Estuvimos un rato explicándole que no la habíamos conseguido y pidiendo que nos deje continuar hasta que sin decirnos nada nos sello los pasaportes.

Pasamos a otra habitación con muchas cajas como si fuera una mudanza donde teníamos que hacer la entrada del auto pero la persona que hace el tramite no estaba, después de esperar mas de una hora apareció y rápidamente nos hizo el tramite.

En el camino hacia Tegucigalpa nos encontramos con que la ruta estaba en muy mal estado era muy complicado manejar y esquivar tantos pozos, un tramo estaba cortado y tuvimos que agarrar un desvió pero después de atravesar varios pequeños pueblos empezamos a ver desde lejos la ciudad.

Tegucigalpa no es una ciudad muy segura para caminar, sin embargo con nuestra amiga Andrea pudimos conocer varios lugares incluido el gran mercado en donde se puede comprar ropa, comida, juguetes, electrodomésticos. El parque central con la catedral y la peatonal en donde hay muchos vendedores, gente y artistas en las calles.

Después del Huracán Mitch que en el año 1998 afecto a la ciudad mucha gente que vivía en los cerros tuvo que trasladarse a vivir en asentamientos durante varios años, hasta que fueron reubicadas en nuevas colonias en los alrededores de la ciudad.

Una comida tipica de honduras son las baleadas, tortillas de harina que se compran o las hace uno es su casa y se acompañan con frijoles, arroz, aguacate, huevos revueltos o queso.