Cali - Colombia

Después de unos días frescos en Pasto, llegamos al calor, Cali, una ciudad con mucho movimiento y buena energía, sonando por todos lados "Salsa" que todos van cantando bajito al ritmo de la ciudad...

 Los Jeep son medios de transporte publico que mucha gente utiliza para trasladarse

 En todo Colombia las calles se llaman, Carreras y Calles y se identifican por número

San Antonio es un barrio muy bonito de Cali, con edificaciones antiguas, donde hay muchos bares, restaurantes y música en vivo. A la mañana caminan los vendedores con carros, anunciando en vos alta para que se escuche desde adentro de las casas, aguacates, frutas, verduras...

Alvaro nos recibió en Cali junto a Berta y su familia, que cocino una de las comidas típicas de Colombia: Fríjoles, acompañados con arroz, aguacate y tajada de plátano maduro frito con panela, que es azúcar de caña. En un almuerzo donde nos contaron muchas historias de sus viajes por el mundo...

También nos llevaron a dar un paseo por la ciudad y nos invitaron a probar "Champú" que es un dulce que se hace con maíz y lulo (naranjilla) es muy rico y refrescante!!!

Aparecieron nuevos términos para identificar las cosas: a una rotonda se le dice Romboi. Cruzar a la derecha, es doblar a la derecha. Un taleguito es una bolsa en un mercado. En un saludo lo primero que se dice es: Qué mas! que es como decir Cómo estas? Al atender el teléfono se dice: Aló. Y cuando vas a comprar o pedir algo se dice: Por favor me regala....Y en los negocios apenas entras te dicen:  A la orden!
Apareció la palabra Berraco o Berraquera que se utiliza para definir muchas cosas. Por ejemplo nosotros al viajar en auto desde la patagonia hasta Cali y querer seguir viajando, somos muy berracos!!!

Laguna La Cocha, Colombia

Al pasar los días en Pasto varias personas nos recomendaron que vayamos a conocer la laguna La Cocha. Salimos un día temprano y buscamos la ruta que va hacia el valle del Sibundoy que nos llevo hasta el pueblo de El Encano, desde ahí bajamos por una calle larga que nos llevo casi hasta la laguna, nos regresamos y buscamos otra calle que entre medio de sembrados y campos con vacas nos llevo hasta donde nos quedariamos a pasar los próximos días, en la puerta del restaurant de Rosaura, estacionamos la camioneta y desde ahí por un caminito bajábamos a la laguna.

Rodeado de montañas y mucho verde, el silencio abundaba en este lugar mágico, donde pasamos los días disfrutando del paisaje y del frío

Algunos días caminamos hasta el pueblo a buscar algo de comida. En el camino veíamos como las personas trabajan la tierra sembrando cebollas o papas en el terreno inclinado de la montaña. 

Cuando entramos a Colombia nos ofrecieron un "tinto" a las 5 de la tarde, dijimos que no, pensando que era vino. Ahora ya aprendimos que "Tinto se le llama al caf'e" en todo Colombia.

Pasamos los días descansando y contemplando todo alrededor. Retomando energías para seguir viaje por Colombia, donde la naturaleza parece ser tan generosa, como las personas que lo habitan que no dejan de brindarte su ayuda y atención siempre que pueden.

Cosechando papas en Nariño - Colombia

Lady y Alberto nos recibieron en Pasto y nos invitaron a pasar unos días en Nariño, en una cabaña donde cosechamos papas.

Las papas mas deliciosas que hemos comido!!!

Caminando por las montañas llegamos al río y de ahí fuimos a conocer el Abismo donde cae un impresionante salto de agua

 Dimos la vuelta por la montaña para ir a verlo desde abajo

 Regresamos a seguir comiendo papas

después de haber pasado un día con los cuatro elementos de la naturaleza

Bienvenidos a Colombia

Entramos a Colombia por Ipiales. En la frontera lo primero que nos dijeron es que tengamos cuidado porque corremos el riesgo de enamorarnos del país y querer quedarnos. La verdad no han estado tan errados, es un país increíble, que tiene de todo, unos paisajes alucinantes,  gente cordial, amable y alegre, super Chevere!

Pasamos los primeros días en Ipiales. En la frontera, por primera vez, revisaron el auto, se fijaron que los datos de la tarjeta de propiedad coincidían con los que están grabados en el motor y la carrocería. Fueron  muy serios y muy amables. Nos dijeron que teníamos que sacar el SOAT, el seguro obligatorio para el auto que lo vende por 3 meses y hay que conseguirlo en la ciudad. Después de averiguar en varias aseguradoras encontramos un supermercado que esta enfrente de la plaza principal que dentro tiene un stand de el SOAT donde encontramos el precio mas económico.

Seguimos viajando y nos fuimos rumbo a Pasto. Algo que nos llamo la atención apenas entramos  a Colombia fue la cantidad de renoletas, renault 12, R 9 que se ven y en muy buen estado

Esto no era una exposición era un día normal en la ciudad...

También hay muchisimos mototaxis

Nuestro amigo Salomón nos brindo casa junto a su hermosa familia.

Una noche estuvimos con el en la calle, protegiéndonos de la lluvia bajo un alero. Con amigos músicos que  tocaron y cantaron música colombiana y ecuatoriana, mientras alrededor  la gente vendía perros calientes, arepas, cuidaban carros, mucho movimiento en la noche de Pasto. Donde además de conocer historias sobre Colombia, aparecieron las canciones de Aterciopelados y muchos nuevos términos que se usan en lo cotidiano: marica, nena, chevere, camellar, cualquiera le da razón...

Pasando la mitad del mundo

Saliendo de la amazonia nos fuimos alejando de la selva, el abundante verde y el calor. En el camino nos encontramos con el arreglo de un puente, tuvimos que esperar a que cambiaran un pedazo de puente y seguir viaje

Seguimos camino por las montañas donde el clima se puso frió y entramos a una zona agropecuaria de cultivos y cría de animales. Ecuador es tan pequeño y diverso, que en solo 200 km que separan El Coca de Baeza pasamos de sentir 40 grados de calor a un clima templado y frío.

Seguimos viaje hacia Quito y en la carretera se veían muchas personas vendiendo leche  transportándola en camiones o burros

Para no entrar a la ciudad de Quito, que ya conocíamos, decidimos quedarnos en Pifo, un pequeño poblado muy tranquilo que queda a 15 minutos de Quito. 

Después de cruzar la mitad del mundo, seguimos hacia Otavalo, una pequeña ciudad de calles angostas donde hay una enorme feria de artesanías.Calles y calles de puestos en los que venden de todo

Seguimos viaje hacia el norte pasando por Ibarra llegamos a Tulcan para despedirnos de Ecuador después de haber estado durante tres meses en un país pequeño en tamaño pero grande en diversidad de lugares y culturas!!!